Aprender es algo que hacemos todos los días, son nuestras experiencias las que nos permiten realizarnos como personas y a la vez, participamos en diferentes actividades que nos permiten ejercer esto que vemos aprendiendo.
Las comunidades de práctica son estos grupos sociales que hacemos con el fin de desarrollar nuestro conocimiento, compartir intereses, problemas o pasión sobre algún tema y a su vez que nos permita interactuar con los demás para que estas relaciones sean fortalecidas.
Etienne Wegner es un autor suizo teórico de la educación, al que se le acuña este concepto de comunidades de práctica, como se puede visualizar en el siguiente documento: www.uoc.edu/rusc.
El antecedente de este concepto tiene lugar en el aprendizaje y en el aprendizaje situado que conlleva a otro concepto importante el de la participación periférica legítima.
De esta participación surgen esas relaciones entre los novatos y veteranos para interactuar en su conocimiento y añadir a estos novatos a formar parte de estas comunidades de práctica.
No obstante, este aprendizaje esta relacionado con la acción porque es con ésta con la que aprendemos todos y nos permite añadir a los demás a éstas prácticas.
Como una comunidad de práctica me remito a pensar en la tradición del carnaval de Tlaxcala, donde muchas personas comparten este interés y esta pasión y los lleva a profundizar este conocimiento para interactuar con los demás.
Estoy de acuerdo de que aprendemos en contextos situados, porque nuestro aprendizaje se debe a situaciones temporales a acciones y circunstancias que nos han situado en algún momento importante y por supuesto a nuestra cultura.
APRENDIZAJE SITUADO
Participación periférica legítima
Jean Lave y Etienne Wenger
Situated Learning. Legitimate peripheral participation. New
York: Cambridge University Press, 1991 (16th. printing)
Traducción de Miguel Espíndola y Carlos Alfaro